Por Miodrag Borges
Desgraciadamente, estamos viviendo en una época en la que parece que los hidratos de carbono son el demonio y los culpables de los problemas de salud de la población.
Sin embargo, si echamos la vista atrás unas décadas podremos encontrar que las grasas pasaron por el mismo camino. Un error de concepto terrible que trajo numerosos problemas de salud e hizo proliferar los productos light que, por suerte, han ido desapareciendo de los lineales de los supermercados.
Y es que los hidratos de carbono cumplen funciones importantes en la salud, como también las grasas. Por ello erradicarlos como la peste no parece la mejor opción.
Pero puede que hayas escuchado hablar acerca de que son un macronutriente no esencial porque nuestro cuerpo puede sustituir sus funciones con las cetonas, y es cierto pero entre otras cosas no es lo óptimo para la salud. De hecho, ni siquiera conocemos hoy día los efectos de alargar una dieta cetogénica indefinidamente.
Además, de manera habitual, los carbohidratos nos ayudan en distintas funciones como:
- Ser fuente de energía
- También reserva de energía
- Colabora en el funcionamiento del sistema nervioso central
- Participa en la regulación del metabolismo
- Ayuda a tener una correcta función intestinal
Ahora bien, la elección de las fuentes de hidrato así como el aporte adecuado en cantidad serán esenciales.
Las verduras y hortalizas, la patata, el arroz o la quinoa no son comparables con sémolas, harinas, pastas o ultraprocesados cargados de carbohidratos.
Por todo ello, en ALTUM Foods nuestros menús de comida saludable a domicilio son equilibrados en ellos.